Pata de elefante

Pata de Elefante

Es una de las plantas de interior más bonitas que existen y dan un toque muy elegante a cualquier estancia.

Curiosidades:

La base del tronco es un depósito de agua, porque aunque no lo parezca, pertenece a la familia de las Crasas y Suculentas.
En maceta pueden alcanzar 1,5 metros, pero en su entorno natural pueden llegar a 10 metros.
Es muy longeva. En Elche (Alicante), hay una pata de elefante de casi 300 años, con 8 metros de altura y 3 metros de diámetro.
Florece en primavera, en plantas de más de 10 años.

Cuidados clave:

Luz: prefiere zonas con mucha luz, incluso admite un poco de sol directo. Se adapta también a zonas poco luminosas, aunque el crecimiento de la planta se relentizará.
Temperatura: +5°. Quiere calor, no resiste el frío. En inviernos con heladas, se debe meter dentro de casa.
Riego: Pulverizar todo el año para evitar puntas secas.
- Otoño/Invierno: 1 vez/mes.
- Primavera/Verano: cada 15 días.
- Los ejemplares adultos necesitan menos riego que los jóvenes.
- Dejar secar la capa superficial del sustrato entre riego y riego.
- El exceso de agua puede pudrir el tallo por dentro.
Abono: 1 vez/mes en primavera y verano, ya que es una planta de crecimiento lento. Se aconseja abono orgánico.
Transplante: en primavera y muy poco frecuentes, siempre en macetas bajitas y anchas, para que las raíces se desarrollen como necesitan. La tierra de los cactus es ideal para ellas.
Plagas: es una planta muy resistente a los insectos, aunque le pueden atacar los ácaros y las cochinillas.